El boom hispanoamericano fue un movimiento literario que se da cuando el trabajo de grupos de novelistas hispanoamericanos jóvenes fue ampliamente distribuido en Europa y en todo el mundo entre los años 1960 y 1970. Ellos no contienen ningún grupo especifico, tendencia o escuela artística, tan solo coinciden teniendo una identidad del cual solo era común el uso de la lengua española y con el hecho de no ser nativos de España sino de diversos países del bloque hispanoamericano. Se decía que los escritores del boom desafiaron los estándares de la literatura hispanoamericana debido que sus trabajos eran experimentales y de clima político.
La mayoría de los expertos suelen decir que el punto de arranque de este movimiento fue centrando sin excepción en el género novelístico, con la obra que tuvo un número elevado de lectores en junio 1963, que fue la mítica y revolucionaria “rayuela”, del argentino J. Cortázar seguido de los primeros títulos del peruano M. Vargas Llosa.
La mayoría de los expertos suelen decir que el punto de arranque de este movimiento fue centrando sin excepción en el género novelístico, con la obra que tuvo un número elevado de lectores en junio 1963, que fue la mítica y revolucionaria “rayuela”, del argentino J. Cortázar seguido de los primeros títulos del peruano M. Vargas Llosa.
La palabra "boom" es una onomatopeya que indica el sonido de una explosión, luego un boom literario es eso: la explosión de largos años de silencio, de arduo trabajo, en circunstancias poco ideales política y económicamente.
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